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Este protector tubular protege la parte dorsal de los dedos de los pies y las manos, evitando la formación de rozaduras, callos, ojos de gallo y ampollas. Además alivia el dolor provocado por dichos callos y ampollas una vez formados. Para colocarlo cortar el tubo a la medida deseada con unas tijeras, retirar el film protector, darlo la vuelta y colocarlo en el dedo, con el gel sobre la zona a proteger. Cada trozo puede utilizarse 10 dias. En caso de ampolla, pincharla sin retirar la piel y aplicar sobre la misma. No utilizar sobre heridas abiertas y vigilar su uso en personas con pie delicado (diabéticos, con úlceras varicosas, etc)
Lavar a mano sin frotar en agua fría o tibia, y al secar no exponer al sol ni otras fuentes de calor directas